Correr un tren, viajar en primera, llegar tarde y recorrrer una ciudad abandonada

Ante todo, disculpas por la demora en el posteo, en Bilbao no habia computadoras y escribir un blog desde el celular es un laburo que solo un japones esclavizado podria hacer. Ya habiendo ofrecido las disculpas del caso, comienzo a relatar mi partida de Madrid y mi estadia en Bibao.

El tren de Madrid hacia la capital vasca salia a las 16 horas, por lo que un servidor, que se desplazo a gusto y piacchere por toda la ciudad conociendola de punta a punta, supuso que en 40 minutos se podria llegar desde el hostel hasta la terminal de Atocha, considerando el excelente servicio de los subtes y la poca distancia a recorrer. 

Considerando esto, decidimos salir a recorrer por ultima vez la principal ciudad española, caminando como esclavo egipcio nuevamente a lo largo de incontables calles, con el mismo resultado: perderse.

Una vez que nos ubicamos, que le sacamos fotos a la manifestacion del 1 de mayo en Puerta del Sol (quejandose contra las nuevas medidas de flexibilizacion laboral impuestas por el gobierno), comimos en el museo del jamon (bastante barato tambien, por dos euros tenes un sanwich de jamon crudo y una birra) y arrancamos para el hostel para emprender la retirada. Juntamos nuestros bartulos y nos fuimos. 

El subte vino, como siempre, rapido, y la combinacion no se nos hizo para nada complicada (termina siendo bastante intuitiva despues de todo), pero pese a todo esto llegamos sobre la hora a la terminal. 

Nos mandamos directamente para los andenes sin siquiera saber de donde salia el tren, luego de preguntarle a una persona que nunca supe si era pasajero o empleado, y ante su respuesta, emprendimos camino hacia el "lobby" (no me sale la palabra) donde se mostraban los horarios de los trenes: anden 18 en 10 minutos.

Ok, diez minutos parece mucho, pero es mucho cuando sabes a donde tenes que ir, por el contrario, si estas en una de las terminales de tren mas grandes de Europa y no tenes idea para donde arrancar, los 10 minutos te quedan cortos. 

Asi es como corrimos (bah, caminamos rapido) hasta dar con la terminar de donde saldria el tren que nos llevaria a destino, presentamos los tickets, los pasaportes, pasamos los bolsos por el scanner y listo: estamos en el tren. 

El tren es la puta pasada, asientos comodos (comodos, nada mas... no son sillones ni mucho menos, y tampoco se reclinan tanto como seria ideal) y un servicio de la putisima madre, nos atendieron mejor que en el avion. Pasaron 4 o 5 veces a ofrecernos bebidas, nos dieron una merienda con una porcion de torta que era la leche, nos regalaron auriculares para poder ver la pelicula que daban, y hasta nos ofrecian TOALLAS CALIENTES!! (ok, la realidad es que no se para que servirian, pero se que en los aviones mas pro las ofreces, y con eso alcanza)

El viaje se hizo comodo, dormimos bastante y para cuando llegamos a Bilbao todavia habia algo de luz diurna por lo que emprendimos viaje al hostel antes de que se haga de noche. 

No es de sorprender que un servidor y su compañero de viaje se pierdan en el camino, por lo que tuvieron que preguntarle a dos nenas y una pareja de viajos para llegar, alcanzando buen puerto gracias a las explicaciones de ambas parejas (en Bilbao la gente tiene mas ubicacion que en Madrid).

Llegamos al hostel y para nuestra sorpresa no hay nadie en la recepcion. Y no solo eso, tambien habia un cartel que decia: recepcion hasta las 20 hs.... PERO LA PUTA QUE ME PARIO!!.. ya nos habiamos imaginado tener que recorrer todo Bilbao buscando un hospedaje para cuando marcos ve que arriba del descritorio hay un papel con mi nombre. Ese papel resulto ser la explicacion de como encontrar nuestras camas, sumado a un mapa de la ciudad.

Esto no fue casualidad, ya uqe yo habia mandado un mail esa misma tarde informando que iba a llegar tarde, por lo que el hecho de que ese papel existiera era gracias a esa inteligente intervencion mia. Me senti muy orgulloso.

Ok, llegamos a Bilbao y al hostel, ahora solo faltaba comer algo. Dejamos las cosas en la habitacion y emprendimos camino hacia algun lugar para comer. 

La realidad es que un martes a las 22:30 hs Bilbao esta muerta, no hay casas de comidas, ni bares, ni locales abiertos, por lo que nuestra unica opcion fue (muy a mi pesar) ir a comer al Burguer King de la estacion de tren, comiendo un menu que mas alla de rico, era caro. 

Terminamos de comer, y considerando que todavia era temprano decidimos recorrer la solitaria y desertica ciudad, sin mas contemplaciones que caminar sin sentido. Pasadas un par de horas, decidimos volver al hostel a dormir. 

Amanecido el dia siguiente la ciudad se presenta de una forma totalmente diferente, lo que antes eran piolas construcciones nocturnas pasaron a ser INCREIBLES construcciones. El Guggenheim, el puente y la ciudad en si misma es algo que vale la pena visitar. No se cuantas fotos le saque al museo, ni se cuantas le saque a la ciudad, pero despues de ver la camara, y habiendo pasado solo tres dias, el contador ya informaba arriba de 500 fotos tomadas. Ustedes diran que es mucho, yo digo que despues de ver lo que vi, todavia es poco. La movida en cuestion de arquitectura que tiene Bilbao es algo fantastico, el caso nuevo es increible en funcion de lo moderno que es, mientras que el casco viejo resulta un viaje al medioevo, con calles angostas, de piedras, y donde no es dificil imaginar como seria el mundo en ese momento. 

A lo largo del dia recorrimos ambos cascos, la cancha del Athleti de Bilbao, paramos a comer en un bar de los alrededores de la cancha, caminamos por la rivera del rio y vimos todo lo demas que la ciudad nos podia ofrecer. 

La cuestion es que despues de desayunar habiamos salido del hostel a las 10 am, siendo las 18 hs, y despues de caminar ocho horas como pelotudos, retornamos con nuestras piernas casi desintegradas al lugar donde nos hospedabamos. 

Considerando que nuestro tren hacia Barcelona salia a las 7 am, y teniendo en cuenta que si hay algo por lo que no me guste ser recordado por mis compañeros de habitacion es ser el hijo de puta que te despierta con la luz de la pieza a las 5:30 de la mañana, decidimos armar el bolso la noche anterior. 

Una vez armado el bolso y siendo las 22 hs, arrancamos para un barcito de por ahi a ver el partido entre el Athleti y el Real Madrid. 

El partido una mierda, el Athleti se comio 3 y los pechos del Real salieron campeones, pero bue... nadie me quita la experiencia de ver un partido del Bilbao, en Bilbao, en un bar hincha del Bilbao. Finalizado el partido, decidimos irnos a dormir temprano para levantarnos aun mas temprano a la mañana siguiente. 

Hable con Vicky por Skype e intente hacer lo propio con Anto, lo cual logre despues de hora y media de llamarla y teniendo que acostarme a las 2 am. Luego de hablar con toda mia familia y con mi novia, finalmente, era momento de dormir. Al dia siguiente partiamos hacia la capital de Catalunia.